¿Realmente conoces todos los tipos de facturas que existen? Como autónomo o Pyme seguramente en tu día a día debes enfrentarte a diferentes facturas(¡Y sobre todo afrontar tu contabilidad sin miedos!). Pero, si aún no te queda claro las diferencias y para que puedes usar cada una de ellas, comienza a tomar nota de todas.
Tipos de facturas
Dentro de los tipos de facturas que existen, vamos a dividir cada una de ellas en diferentes categorías para que su diferenciación sea mucha más simple y clara.
Facturas según el contenido
- Factura ordinaria
Esta clase de factura es la más conocida y probablemente sea la que usas con más frecuencia. En ellas se recogen las operaciones comerciales por compraventa o prestación de un servicio.
Las facturas ordinarias deben contener información detallada de la operación que se ha realizado. Nos referimos a la información del receptor, el importe, quien emite la factura, número de la factura, tipo de impositivo del IVA, entre otros muchos más.
- Factura rectificativa
Como su nombre indica, este tipo de facturas son las que debes usar cuando has cometido algún tipo de error en otra factura ya emitida. Por tanto, en lugar de modificar la factura donde se ha producido un error, es necesario emitir una factura rectificativa.
En caso de que la emitas para la corrección, tanto la factura con el error, como la rectificada serán válidas. Es recomendable que la emitas tan pronto como tengas constancia del error.
Las facturas que se han emitido hace más de cuatro años no podrán realizarse una factura rectificativa.
- Factura recapitulativa
Este tipo de factura nos permite agrupar varias operaciones cuando las has realizado con una misma persona en un corto plazo de tiempo.
Concretamente las puedes usar para incluir ventas realizadas en diferentes días en una misma factura. Pero, siempre que sea al mismo cliente y en el mismo mes.
Es igual de valida que una factura normal, por lo tanto, debe contener también los datos básicos. Junto con el importe total de las ventas en el mes y la descripción breve de todas las operaciones que se han realizado.
Facturas según el valor
- Factura proforma:
Estas factura no poseen un valor contable ni sirven para justificar un gasto. Podemos decir que se trata de una factura que se facilita con anterioridad de la compra o prestación de servicio como información.
Vamos a poner un ejemplo muy sencillo, seguramente has comprado por Internet algún producto y en el momento de efectuar el pago te han facilitado una factura proforma. Sin embargo, en el momento de recibir tu pedido incluye la factura corriente. Recuerda que es importante que indiques de forma visible en la factura es proforma.
Facturas en base a los requisitos
- Factura simplificada
Como su nombre indica, son facturas más simples. No es necesario que se incluya en ellas todos los datos de una factura completa. Por tanto, este tipo de facturas son mucho más simples de realizar.
- Facturas completas
Las facturas completas son aquellas que se incluye todos los datos requeridos. Estos datos son los siguientes:
- Emisor: El nombre y apellidos. Incluyendo también el domicilio y NIF de la persona o empresa que realiza la venta o presta el servicio.
- Número: el numero correlativo de la factura.
- Fecha: incluir el día en el que se emite la factura.
- Remitente: Incluir el nombre y apellidos, dirección y NIF de la persona o empresa a la que se le va a enviar la factura.
- Concepto: Debes poner una pequeña descripción de los servicios prestados o la venta del producto realizada.
- Importe: Base imponible del coste total sin impuestos.
- Retención de IRPF: Según el tipo, puedes reflejar la retención en caso de que sea necesario.
- IVA: Dependiendo del tipo de IVA, debes indicarlo.
- Total: Suma de la base imponible – IRPF + IVA.
- Forma de pago: la forma en la que se va a realizar el pago.
Facturas en función del medio
- Factura tradicional
Como te puedes imaginar, una factura tradicional es aquella que se entrega en papel. También puede ser enviada por correo electrónico al escanearla, pero sigue siendo una factura tradicional.
- Factura Electrónica
Al contrario que las facturas tradicionales, estas no requieren de un soporte físico. Poseen la misma validez que una tradicional. Debe contener los campos obligatorios a toda factura.
Desde EFISCO esperamos que conozcas todo sobre los tipos y no te haya quedado ninguna duda. Recuerda que si quieres iniciarte en la contabilidad puedes encontrar diferentes cursos en nuestra web. No te pierdas nuestras novedades en el blog y redes sociales: Facebook.